
Es importante llevar a tu hijo con un especialista en trastornos convulsivos si presenta convulsiones recurrentes, ya que pueden ser síntoma de una afección subyacente. Un diagnóstico y tratamiento adecuados pueden ayudar a controlar los síntomas y prevenir complicaciones. Además, el especialista puede ofrecer asesoramiento sobre cómo manejar los síntomas y reducir el riesgo de futuras convulsiones.